martes, 9 de julio de 2019

PIEZA DEL MES JULIO 2019



En este mes de julio, recuperando la actividad “la pieza del mes” queremos destacar el carretón, este mueble de madera, en este caso sin ruedas, aunque su tipología será más amplia, la cual comentaremos posteriormente, cuya finalidad era colocar al infante,  para poder vigilarlo en una habitación determinada. En los laterales, se añadían especies de bandejas donde se colocaban juguetes o similares para entretener al pequeño,  si observamos este caso concreto podemos ver como la cascara seca de algunos frutos también servían de distracción.



Los carretones infantiles, cuyo origen es medieval, son el antecedente de los modernos tacatás y de las tronas. Se diferencian de los andadores, en que no eran artefactos pensados para aprender a andar, sino para que el niño se mantuviera seguro, ya fuera sentado o pie. También para su distracción ya que algunos contaban con ruedas, lo que permitían su desplazamiento con el empuje de la madre.
Otra tipología de los mismos incluían una estructura con asiento y bandeja.
El objetivo de este tipo de mobiliario infantil no es propiamente que el bebé aprenda a andar, sino que se mantenga en equilibrio y sobre todo, pueda tenérsele controlado en un espacio determinado y entretenido. La funcionalidad de la bandeja, como se mencionó anteriormente, es la de poder poner pequeños objetos con los que pueda jugar.
Fueron empleados en todos los estamentos, pues se ha encontrado documentación gráfica de este tipo de artilugios tanto en retratos infantiles del siglo XVII como en escenas cotidianas de las clases trabajadores de finales del siglo XIX.
El diccionario de la RAE define el carretón como “taburete sobre cuatro ruedas pequeñas en donde se pone a los niños que están en mantillas. “
Aunque a veces estos ingenios aparecen erróneamente definidos como andadores, cosa que no son, ya que no permiten que el niño pueda andar por sí solo, como sucede ahora en los modernos tacatacas.

Finalmente, añadir que el ejemplar con el que cuenta el Torreón de Pernía se ubica en la sala destinada a la cocina de humo cepedana.