sábado, 31 de octubre de 2020

Descubriendo artistas: Cristina Ibáñez

 

Cristina Ibáñez. Fuente: tamtampress.es

Cristina Ibáñez nace en León en 1962, es licenciada en Bellas Artes y doctora en Humanidades por la Universidad Pompeu Fabra (Barcelona), actualmente es profesora de Artes Plásticas, Diseño en la Escuela de Arte y Superior de Conservación y Restauración de León, actividad que combina con la creación y la restauración de BBCC.

Sus estudios de pintura comienzan en el año 1981, participando con el Colectivo de Jóvenes Artistas Plásticos de León, con el que realiza varios encuentros en León y Sahagún. Desde el comienzo del periodo de formación trabaja y expone en Cataluña y León hasta finales de los años 80, momento en que regresa a León por un periodo de dos años tras el que vuelve de nuevo a Barcelona. Visita Alemania y realiza una pequeña exposición a través de una Asociación Cultural en la ciudad de Hechingen para regresar, tras otras experiencias profesionales, finalmente a León desde los años 90.

Durante su trayectoria artística aparece ligada al ‘informalismo’ manteniendo algunas relaciones o aproximaciones con el estilo, en su definición más amplia.

Asimismo cabe destacar su profunda vinculación con la naturaleza. De este modo, en 2018 expone ‘Acervo’, una exposición vinculada con la simbología de los mandalas, relacionando los lenguajes y la unión entre la palabra y el signo gráfico entendido en diferentes vertientes, que abarcan desde las imágenes de la prehistoria a los signos y escrituras de todo el mundo, manifestando gran interés por experimentar con soportes y técnicas mixtas. Es esta exposición emplea materias orgánicas propias del paisaje rural, enlazando el pasado con el presente y a través de los  cuatro elementos (fuego al sur; tierra al este; aire al norte y agua al oeste) relacionados con la orientación del lugar de exposición (Palacio de Don Gutierre), consigue vincular y hacer partícipe tanto al edificio como al espectador el cual completaría el círculo.  (https://cultura.jcyl.es/web/jcyl/Cultura/es/Plantilla100Detalle/1284282053297/_/1284803928965/Comunicacion)

Obra Cristina Ibáñez para 'Acervo'. Fuente: diariodeleon.es


En ese mismo año, 2018, en el Torreón de Pernía tuvo lugar la exposición ‘Tensiones’ donde Cristina Ibáñez participa en este caso vinculada al arte efímero, Efímero III, donde de nuevo aparecen reflejados sus conocimientos y estudios sobre los signos y escrituras, a la par que su vinculación, siempre presente, con la naturaleza.  En este caso, nos trasladó a través de su instalación a las pinturas rupestres esquemáticas de Peña Piñera, en Sésamo (Vega de Espinareda, León), se trata de un antropomorfo en forma de ‘Phi’ griega. La instalación quiso rendir un homenaje a este tipo de pinturas esquemáticas rupestres que enlazan con la imaginería de las pinturas que son comunes en diferentes entornos. El hecho de representarlo en materiales coloreados y reciclados y sobre el terreno hace referencia a la vida como un acontecimiento efímero, y la posibilidad de recordar formas elementales en entornos enlazados por hitos sagrados asociados a lo recóndito de un lugar oculto a los ojos de los mortales. 


Efímero III, instalación para la exposición 'Tensiones'


También en 2019 presentó su exposición ‘Kami’, un término japonés, el cual simboliza la fuerza, expresión o energía de los fenómenos de la naturaleza;  por lo que para la muestra encontró su inspiración en la montaña de Valdeteja, tendiendo puentes “entre el oriente del alma y el occidente de la crítica” (https://tamtampress.es/2019/12/09/cristina-ibanez-explora-la-naturaleza-tendiendo-puentes-entre-oriente-y-occidente-en-su-exposicion-kami/)


BIOMANDALA AZUL (Obra expuesta temporalmente en el Torreón de Pernía realizada junto con Fernando Tuñón)

Biomandala azul, 2019 (Cristina Ibáñez y Fernando Tuñón) 

Cómo se ha podido observar las referencias simbólicas a la energía o fuerza de los diferentes fenómenos de la naturaleza están constantemente representados en su obra, hecho que se ve reflejado también en la obra que expone junto con Fernando Tuñón para la exposición ‘Naturalezas’. 

Bajo el título Biomandala azul (2019) ambos artistas presentan una fotografía digital sobre aluminio. Una fotografía donde el color, la materia y forma evocan el medio natural, tan presente en la trayectoria artística de Cristina Ibáñez, además de su vinculación con los mandalas, estos elementos cuya terminología es de origen sánscrito, se traducen como circulo, rueda o totalidad aunque también se traduce como el círculo de la energía en expansión; representando la unidad, armonía y la infinitud mediante el equilibrio de los elementos visuales, elementos empleados para meditar y reflexionar sobre la transitoriedad de la vida, es al mismo tiempo un resumen de la manifestación espacial, una imagen del mundo y una representación de los poderes divinos, una definición que encaja perfectamente al contemplar biomandala azul.

Las formas naturales, estructuradas y ordenadas geométricamente con sentido efímero surgen como expresión de la espiritualidad y fusión equilibrada entre el hombre, el cosmos, y la naturaleza en el Mándala azul de Cristina Ibáñez y Fernando Tuñón (Luis García para la exposición ‘Naturalezas’)

Biomandala azul, 2019 (Cristina Ibáñez y Fernando Tuñón) 
Biomandala azul, 2019 (Cristina Ibáñez y Fernando Tuñón) 

«Para mí hay mucha desnudez personal, en mi obra, pero en esa desnudez es donde yo pienso que me puedo comunicar con cualquier otro ser, porque desnudos somos todos iguales y esto es la parte que más me interesa explorar y comunica directamente a través de lo espiritual, de las emociones, de lo trascendente» (Palabras de Cristina Ibáñez para una entrevista en La Nueva Crónica, 2019 https://www.lanuevacronica.com/me-gustaria-conocer-japon-y-visitar-una-fabrica-de-papel)

 

ENLACES DE INTERÉS:

Cristina Ibáñez: https://actividadesculturales.unileon.es/507

Los ‘mandalas’ de Cristina Ibáñez: https://www.diariodeleon.es/articulo/cultura/lsquo-mandalas-rsquo-cristina-ibanez/201804120400021759791.html

 

domingo, 18 de octubre de 2020

FILANDONES Y SU VINCULACIÓN A LA MUJER RURAL

 

Filandón. Fuente:turismoreinodeleon.com

Continuando con la conmemoración del Día Internacional de la Mujer Rural (15 de octubre), este año como os compartimos aquí, destacábamos las labores de hilado, y del papel de la mujer rural en este ámbito, gracias a la fotografía de Asunción, vecina de Sopeña de Carneros. 

A tenor de esto, hoy hablamos de los filandones y su vinculación con las labores de hilado y con la mujer rural: 

Aunque a día de hoy están declarados como Bien de Interés Cultural (BIC) por las Cortes Autonómicas, el filandón, ha tenido una larga historia a sus espaldas, incluso llegaron a estar prohibidos por las autoridades eclesiásticas, impulsado, especialmente, por el Concilio de Trento en el siglo XVI. 

En su etimología ya podemos observar su procedencia, filandón (del leonés filar) o también recibe otras denominaciones tales como hilanderos, seranos, filandar., fiadero, hilorio, hilandón o hila. En definitiva, su origen se remonta a las reuniones o veladas nocturnas, típicas de la región leonesa, donde las mujeres hilaban, de ahí su terminología, y los hombres mientras realizaban otras actividades como la labranza de madreñas o actividades como la cestería, sin embargo, lo destacable de estas reuniones era que sus participantes al mismo tiempo, contaban historias, cuentos, cantos y bailes, en torno a la lumbre, ya que generalmente se realizaban en las noches de invierno, aunque atendiendo a las condiciones climáticas de la región leonesa y en especial de los pueblos de montaña, siempre se ampliaban a las noches de otoño y primavera. 

Por lo que podemos deducir, el origen de estos encuentros está en la reunión de las mujeres para hilar, círculo al que se fueron incorporando otras personas para culminar en una velada lúdica.

Desde un punto de vista histórico, con motivo del espirito reformista del Concilio de Trento, la iglesia católica comenzó a corregir determinadas costumbres populares, entre ellas, se encontraron los filandones, ya que fueron considerados prácticas que motivaban al escándalo, alteraban el orden público o eran contrarios a la moral, por considéralos actos deshonestos, tal y como explica José Ignacio Martín Benito. Castigando a las personas que incumplían las normas desde multas de alta cuantía hasta penas de cárcel. Hechos no solo penalizados por las autoridades eclesiásticas sino también, en algunos lugares por las autoridades locales. 

A pesar de lo narrado anteriormente, los filandones se mantuvieron durante buena parte del siglo XX en determinadas zonas, sin embargo, algunos de los cambios producidos por la sociedad rural, en especial el éxodo a las ciudad y el descubrimiento de nuevas formas de ocio, como la televisión, fue marcando poco a poco su desaparición. Asimismo, también contribuyeron a esta pérdida, el desvanecimiento de las prácticas de hilado y tejido manual, que habían sido el origen de los mismos. 

En la actualidad, se recrean en actos y semanas culturales por las diversas comarcas leonesas que ayudan a que no se pierda este signo de identidad y de gran valor del patrimonio inmaterial que fue tan habitual en nuestras tierras. Mencionar en este sentido a Luis Mateo Diez, José María Merino, Juan Pedro Aparicio que en 2008 con su gira ‘filandones literarios’, acercaron la esencia del filandón a diversos territorios.


BIBLIOGRAFÍA 

José Ignacio Martín Benito . (2014). En torno al Filandón. Hilaturas, telares y veladas en el norte de Zamora (siglos XVIII-XX). Brigecio, 24-25, 43-72.

ENLACES DE INTERÉS: 

El día que prohibieron el filandón (https://www.diariodeleon.es/articulo/cultura/dia-prohibieron-filandon/201508230400001535589.html)

El filandón se da a conocer en Castilla (https://www.diariodeleon.es/articulo/cultura/filandon-da-conocer-castilla/20080610000000969395.html) 

Filandón, ¿nace o se hace? (https://www.lanuevacronica.com/filandon-nace-o-se-hace) 

El Filandón leonés, entre diez Tesoros Inmateriales de España (https://www.diariodeleon.es/articulo/cultura/filandon-leones-diez-tesoros-inmateriales-espana/200907021218001040785.html) 


jueves, 15 de octubre de 2020

15 DE OCTUBRE, DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER RURAL

Asunción, Vecina de Sopeña de Carneros.


Con motivo del 15 de octubre, Día Internacional de la Mujer Rural, queremos homenajear a la mujer rural con una fotografía que pone en valor el papel crucial de la mujer en  actividades como las del hilado; conmemorando el papel tan importante que han tenido y continúan teniendo las mujeres en la historia y desarrollo del medio rural. Por ello, este día tiene como objetivo el reconocimiento al papel decisivo de las mujeres en el desarrollo agrícola y rural, la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza.

Como breve apunte histórico y a tenor de lo que expone la ONU, el primer Día Internacional de las Mujeres Rurales se celebró el 15 de octubre de 2008. Fue establecido por la Asamblea General en su resolución 62/136, de fecha 18 de diciembre de 2007. En ella reconoce «la función y contribución decisivas de la mujer rural, incluida la mujer indígena, en la promoción del desarrollo agrícola y rural, la mejora de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza rural». Por ello, este día tiene como objetivo el reconocimiento al papel decisivo de las mujeres en el desarrollo, la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza. Según confirma la ONU, las mujeres rurales suponen una cuarta parte de la población mundial, sin embargo, a pesar de que garantizan la seguridad alimentaria de sus poblaciones y ayudan a preparar a sus comunidades frente al cambio climático, la mujer rural continua sufriendo las barreras estructurales y las normas sociales discriminatorias. Mundialmente, con pocas excepciones, todos los indicadores de género y desarrollo muestran que las campesinas se encuentran en peores condiciones que los hombres del campo y que las mujeres urbanas.

Debido a la crisis sanitaria derivada del COVID-19, las actividades presenciales se han cancelado apostando por los recursos digitales y las redes sociales, para crear un pequeño homenaje a todas las mujeres rurales. Esta acción, pretende contribuir al reconocimiento de las mujeres en el campo, así, como dar visibilidad a una de las numerosas tareas a las que tradicionalmente se ha dedicado la mujer, en este caso tejer o hilar.

Todo ello a partir de los fondos museográficos del Torreón de Pernía, con ello y como eje principal, una fotografía en la que se retrata a Asunción, vecina de Sopeña de Carneros, la cual aparece tejiendo, una actividad vinculada a las manos femeninas desde tiempos de la revolución neolítica. Un trabajo constante en la historia de la mujer, especialmente en el ámbito rural, el cual se realizaba junto con otras muchas labores, donde se incluía el cuidado de los niños, la casa, labores agrícolas y ganaderas.  

La fotografía muestra un testimonio de gran valor histórico y documental, donde no solo podemos ver el arte de tejer, sino también la indumentaria tradicional. Asimismo,  se propone también la visita al centro etnográfico ‘Torreón de Pernía’, en el que se exponen varias vitrinas en la planta superior, en las cuales se pueden ver dos de las fibras más utilizadas en la zona de La Cepeda, como son el lino y la lana, debido principalmente a las condiciones climáticas de la región.  Además, acompañando a los principales tejidos aparecen las herramientas con las que se trabajan tanto la lana como el lino; así podemos contemplar dentro de la vitrina dedicada a la lana, la rueca, rocada, husos, cardas, tijeras de esquilar… Y expuestos en la vitrina dedicada al lino husos, carda, espadas…Del mismo modo, el centro dedica otra vitrina a las propias prendas en si, como son los calcetines y patucos, destacando la labor de tejido con cinco agujas. 


Vitrina dedicada a la lana. Torreón de Pernía 2ª planta


Vitrina dedicada al lino. Torreón de Pernía 2ªplanta 

Herramientas para la lana. Torreón de Pernía, 2ª planta.
Herramientas para el lino. Torreón de Pernía, 2ª planta


Vitrina dedicada a las prendas. Torreón de Pernía, 2ª planta


Esta industria textil, supuso una fuente complementaria de ingresos en el mundo rural para las familias que tenían en la agricultura y la ganadería su principal sustento.  Una actividad, que además estuvo muy ligada desde el punto de vista social, ya que labores de tejer e hilar se relacionaban con los filandones, momentos en los que mientras se hilaba o tejía, se contaban cuentos, se cantaba o bailaba. 

El lino es una planta herbácea de las familias de las lináceas, que se sembraba en tierras bajas y húmedas, que darían lugar al nombre de linares, tan conocidos en la zona de La Cepeda, y en especial en las tierras del Ayuntamiento de Villaobispo de Otero, convirtiéndose en producciones de una alta exigencia en mano de obra, donde también cobraran un papel importante la mujer, en la que se incluían las labores de sembrar, cuidar y limpiar hasta su recolección, además de otras operaciones como el desgrane, empozado, majadura, espadadura y rastrillaje.  Por lo que, si la transformación textil de la lana suponía un gran esfuerzo, la del lino era aún más.

En definitiva, con esta pequeña acción, se quiere felicitar y agradecer a todas esas mujeres luchadoras que han contribuido al desarrollo y la lucha de las mujeres, por conseguir una participación activa en todos los ámbitos de la sociedad ya que como bien señala la Organización de Naciones Unidas: las mujeres rurales son una fuerza poderosa que puede impulsar el progreso mundial.


domingo, 11 de octubre de 2020

PIEZA DEL MES OCTUBRE 2020


 

A diferencia de otros meses, en este caso no resaltamos un apero o útil de labranza sino un elemento doméstico, el cual ha evolucionado a lo largo de la historia, convirtiéndose a día de hoy en uno de los electrodomésticos imprescindibles en el hogar, se trata de la plancha, una herramienta cuyos orígenes se remontan a la Antigüedad. 

Planchas de hierro y de brasas expuestas en el Torreón de Pernía, 2ª planta

La ropa sin arrugas ha sido sinónimo de refinamiento, pulcritud y categoría social a lo largo de la historia. No fue hasta el siglo XVII cuando apareció el término plancha, también denominada caja caliente.

 Antes de comenzar la propia descripción del objeto y su historia, es necesario indicar que los materiales como el hierro o el metal, ya se usaban en la Antigua China como recurso tecnológico para alisar la ropa quitándole las arrugas, desde los primeros siglos de nuestra era. Esto explicaría cómo el comercio de la lavandería llega a nosotros a través de la inmigración de China a finales del siglo XIX. 

De esta forma, los griegos usaban una barra de hierro cilíndrica calentada, similar a un rodillo, que pasaban sobre las ropas para marcar el drapeado. Dos siglos más tarde, los romanos ya planchaban y plisaban con un mazo plano, metálico, que literalmente martilleaba las formas deseadas en las túnicas y mantos. Todas las planchas primitivas empleaban la presión como vía para lograr el efecto de estiramiento del tejido. 

Hacia el siglo XVII se empezó a emplear el término ´plancha´ como tal, para designar a los aparatos, no muy distintos a los usados en China en el s. I d C: cajas metálicas llenas de brasas. A partir del s. XIX este modelo convivió con otro tipo de plancha hecha de hierro fundido y maciza que se calentaba directamente sobre los trébedes de la lumbre, de manera que era necesario disponer al menos de dos, para trabajar con una mientras otra adquiría el calor, otra desventaja de esta plancha era que el hollín se adhería a ella y pasaba a las ropas, subsanado cuando se instaló la iluminación de gas en los hogares, en el siglo XIX; muchos inventores idearon planchas calentadas con esa forma de energía, pero la frecuencia de los escapes, explosiones e incendios aconsejó llevar las ropas arrugadas. El verdadero boom en el planchado llegó con la instalación de la electricidad en las casas.

En el caso de las planchas que se exponen en el Torreón de Pernía, observamos dos de los grupos más cotidianos, las planchas de hierro macizo simples, de forma triangular, con asa de madera y superficie bruñida en la base que se calentaba colocándola sobre el fuego.

Planchas de hierro y de brasas expuestas en el Torreón de Pernía, 2ª planta

Planchas de hierro y de brasas expuestas en el Torreón de Pernía, 2ª planta

Y el otro tipo conocida como de brasas o de carbón, y que se convierte en la pieza del mes de octubre de 2020. 
En este caso estamos ante un utensilio de hierro de base plana, formado por un depósito en forma de prisma triangular en el que se introducen las brasas de leña o carbón. En su lado menor dispone de un agujero que cierra por medio de una pequeña chapa circular que gira sobre un remache. Sobre este depósito encaja una tapadera en cuyo extremo se encuentra la chimenea, con la boca girada. También lleva una pequeña palanca para abrir la plancha, un asidero dispuesto longitudinalmente y protegido por un mango de madera que se adapta a la mano y un protector de mano en forma de chapa cóncava con decoración en relieve situada bajo el asa.

Plancha de brasas. Expuesta en el Torreón de Pernía, 2ªplanta

 Decoración iconográfica plancha de brasas. Expuesta en el Torreón de Pernía, 2ªplanta

Plancha de brasas abierta. Expuesta en el Torreón de Pernía, 2ªplanta

Detalle chimenea, plancha de brasas. Expuesta en el Torreón de Pernía, 2ªplanta











Bibliografía:
Ruiz Ezquerro, J.J., Etnografía soriana: museos etnográficos rurales, Soria, 1991

viernes, 9 de octubre de 2020

Descubriendo artistas: Casimiro Martinferre

Casimiro Martinferre. Fuente: armaga.com


Casimiro Martínez Ferrero, más conocido por Martinferre, es originario de Bembibre, donde nace en 1960, comenzando su trayectoria como fotógrafo 20 años después en 1980. 

Es un incondicional de la fotografía en blanco y negro, de la cámara tradicional, en una actualidad en la que las fotografías instantáneas son tan constantes y tan apresuradas, en este caso Martinferre refleja la paciencia en la captura de la imagen, resaltando en su obra, de esta forma, la película analógica, creando fotografías narrativas. 

Según su propia nota autobiográfica: En esos primeros años, expuso en las más variopintos ruedos de la contracultura, en un afán quijotesco de acercar su visión a los recalcitrantes: bares, mesones, casas del pueblo, refugios de peregrinos, hogares del pensionista…

Su obra fotográfica ha estado expuesta en varias galerías de arte, no solo a nivel nacional, sino también a nivel internacional como en la galería Osloart de Noruega. Entre sus exposiciones en galerías leones destacar Ármaga y Dosmilvacas. 

Además de fotógrafo es un magnífico narrador, y colaborador de varios medios de prensa escrita entre los que destaca ‘La Nueva Crónica’ o ‘Bembibre Digital’. Y es que como el propio artista opina en una entrevista para ileón, medio de información digital: “una imagen vale más que mil palabras, es una de las mayores mentiras que podrás escuchar. La fotografía sólo capta un instante, una décima de segundo de la vida: esa es su grandeza. Pero la vida se compone de infinitos instantes, y ahí es donde ganan por goleada las palabras".

De esta forma consigue ligar ambos, la palabra y la imagen, que combina en sus publicaciones como ‘Manuscrito de los Brujos’ una publicación que relata las peripecias de un explorador dominguero, impulsado por un afán investigador hacia la más antigua manifestación cultural del Bierzo: las pinturas rupestres que yacen en sus remotos valles. Aunque no ha sido este el  único publicado, también mencionar “Aires de Xistra” y “Diario de un montañero” o “Territorio”, nombre que también recibió una de sus exposiciones fotográficas, y que recopila las fotografías y los textos aparecidos en esta exposición y en las narraciones que escribió para La Nueva Crónica, durante más de un año.  

En este último libro, “Territorio”, aparecen también sus primeras fotografías las tomadas en los años 80 y 90, las cuales aparecen en un formato cuadrado debido al negativo, realizadas con una cámara hasselblad de negativos de 6x6. En ellas, se puede apreciar su historia y comienzo como fotógrafo, en su amor al paisaje y su afición a la montaña, de ahí su origen comenzando a fotografiar paisajes, ríos o naturalezas muertas, como el caso de la pieza expuesta en el Torreón de Pernía. Para retratar posteriormente, a los habitantes de los pequeños pueblos de las montañas. Como el artista cuenta: “aunque suene paradójico primero descubrí los paisajes y después a la gente que los habitaban”. Por lo que en base a esas fotografías, y a esos instantes captados, comenzó a escribir los textos relativos a los recuerdos que esa fotografía le transmitía.  

Así, en el diario leonés, La Nueva Crónica, podemos leer la narración donde aparece la fotografía de naturaleza muerta, Esqueleto, que expone actual y temporalmente en el Torreón de Pernía; donde uno de sus fragmentos dice:

“Traeré un elenco de doncellas, para que sus estros nuevos fertilicen tus raíces. Iniciaré en ti una pulsión, fecundando con lechada de toro el seco serrín de tus entrañas. Te inyectaré savia de vino y resina perfumada. Crearé una corteza superponiendo en el tronco capas de rico brocado. Prenderé en las ramas hojas de charol, manzanas de vidrio soplado, flores de macramé aromatizadas con canela. Trinarán y anidarán bajo tu amparo las más exquisitas aves, en jaulas de cristal.” (Pueden leer el texto haciendo clic aquí)

ESQUELETO 2012 (Expuesta temporalmente en el Torreón de Pernía)


Obra que forma parte de la exposición temporal “Naturalezas” y se ubica en la escalera de acceso a la segunda planta, en el Torreón de Pernía.

En palabras de Luis García, comisario de la muestra, el sentido poético y evocador de la naturaleza arbórea yerma, desnuda y muerta se hace presente con fuerza en la fotografía Esqueleto de Casimiro Martinferre. 

En ella representa su amor por la naturaleza y el retrato del paisaje, como sus primeras fotografías de los años 80 y 90, la fuerza que evoca la imagen donde es capaz de mostrar en una instantánea los caprichos de la vegetación, el olvido y el silencio. 

MÁS OBRAS DEL ARTISTA:

Entrada al Edén, 1988

Los restos de Cristo, 2012

Demín


ENLACES DE INTERÉS:

https://armaga.com/artistas/casimiro-martinferre/

https://www.ileon.com/cultura/045327/casimiro-martinferre-en-el-quijote-bullen-todos-los-universos-reales-y-ficticios

https://tamtampress.es/2016/09/29/martinferre-presenta-en-la-galeria-armaga-su-libro-de-fotos-y-relatos-territorio/ 


martes, 6 de octubre de 2020

Descubriendo artistas: Julia G. Liébana

 

Julia G. Liébana. Fuente: julialiebana.com 

Julia González Liébana comparte su profesión de Ciencias Empresariales con la fotografía artística. Comenzó de forma autodidacta en 1987. Con el paso de los años la curiosidad inicial se ha convertido en algo más. En 1994 fue cofundadora del estudio F22, especializado en fotografía industrial y publicitaria. Fue miembro de la Junta Directiva de FOCUS (Asociación de Fotógrafos de León) durante 12 años; colaborando en los cursos impartidos. En el año 2014 desarrolla el cargo de Presidenta de dicha asociación y actualmente es “Socia de Honor”.

En su amplia trayectoria artística, ha realizado diversas exposiciones individuales, como en 2015 en el Camarote Madrid o en 2014 en Galería Armaga, formando parte del Festival Nacional “Miradas de Mujeres 2014”, entre otras muchas. Asimismo, ha formado parte de diversas exposiciones colectivas mencionar algunas de las últimas, como ‘Tránsitos’ Una aproximación a la colección de Arte Contemporáneo de la Diputación de León en 2017 o en 2018 participando en la II Bienal Internacional de Arte y Cultura en Roma. 

También ha sido galardonada en diversas ocasiones, así en 2015 recibió el Primer Premio Regional del XXXVII Certamen Nacional PALENCIA-IMAGEN; en 2017 fue premiada en el V Certamen Nacional de Artes Plásticas Camarote Madrid. Uno de los últimos premios recibidos fue en mayo de 2018 con la fotografía ‘Naturaleza muerta’ en el concurso de fotografía en blanco y negro, convocado por el Museo de León para celebrar el Día Internacional de los Museos. 

Aunque se interesa en un primer momento por la fotografía analógica, posteriormente comenzará sus trabajos en el mundo digital, aunque sin perder el trabajo artesanal, confiriéndole un acabado pictórico. De esta forma, recupera la tradición clásica de las fotografías iluminadas. 

Como ella misma describe en su página web: “En mi trayectoria como fotógrafa, siempre ha habido una experimentación y una búsqueda constante. Creo que como bien ha dicho algún creador, tanto en la fotografía como en cualquier forma de arte, siempre hay una proyección de tu mundo interior hacia el exterior y siempre hay una búsqueda y un redescubrimiento de uno mismo.”

Los últimos temas sobre los que ha basado sus obras han sido la identidad y las perspectivas de género, tratados a través del retrato conceptual, así lo mostró en exposiciones como “Y… no están todas?” junto con Esthér Santás. 

Mencionar también que no solo se dedica a la fotografía sino que como ella misma se define es artista visual y videasta, de ahí sus cortometrajes: “Estudio sobre la Luna” en 2017 y “Color Violeta, pliegues sobre la memoria” de 2018. 

SERIE NATURALEZAS MUERTAS, 2020 (expuestas temporalmente en el Torreón de Pernía)

Serie naturalezas muertas. Julia G. Liébana

"La mayoría de las imágenes están construidas con muchos vacíos alrededor, mucho silencio lo llamo yo, para captar mejor la atención del espectador y poner así de relieve la esencia de la imagen" Julia G. Liébana. 

Serie naturalezas muertas. Julia G. Liébana


Serie naturalezas muertas. Julia G. Liébana


En este caso, sus instantáneas parten de la utilización del concepto de bodegón clásico en la composición de cada obra. Sus piezas pueden llegar a crear cierta sensación de melancolía y ensoñación, jugando un papel fundamental en estas emociones el color sepia, que además implica el recuerdo a la fotografía tradicional. 

"La relación entre la pintura barroca clásica de bodegones de Sánchez Cotán y la fotografía artística y actual se formaliza bellísima y magistralmente en las dos piezas de la Serie naturalezas muertas de Julia González Liébana" Luis García, para la exposición 'Naturalezas'. 

MÁS OBRAS 


Tres ejemplos del arte fotográfico de la leonesa Julia G. Liébana.
Fuente: La nueva crónica

“Naturaleza muerta”, fotografía de Julia González Liébana, ganadora del VI Concurso de Fotgrafia en b/n del Museo de León. Fuente: tamtampress.es

Fotografía expuesta en Camarote Madrid. Fuente: tamtampress.es  



ENLACES DE INTERES:

http://julialiebana.com/

https://www.lanuevacronica.com/julia-g-liebana-un-delicado-intimismo

https://tamtampress.es/2020/05/18/julia-gonzalez-liebana-se-lleva-el-premio-del-vi-concurso-de-fotografia-en-b-n-convocado-por-el-museo-de-leon/


viernes, 2 de octubre de 2020

Descubriendo artistas: José Luis Casas Paramio

José Luis Casas
Fuente: esculturaurbana.com


Nace en León en 1979. Estudia en la Academia de Dibujo y Pintura Vargas en León y, posteriormente, se licencia en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca y se doctora en la Universidad del País Vasco. 

Ha realizado diversas exposiciones individuales, entre ellas, mencionar en 2015 "José Luis Casas. Resonancias", Galería Lorenzo Colomo, Valladolid; en 2018 "José Luis Casas. Génesis", Galería de Arte Espacio_E, León. Formando parte también de varias exposiciones colectivas como son "Laberinto Verde", Casa de Asturias, en 2015 o "Arte y Naturaleza", entorno de Las Cuevas de Valporquero, León en 2016. 

Comenzó su trayectoria con obras vinculadas a la transmisión de la tradición más clásica de la escultura, relacionada al mundo del hierro, de la piedra y de la madera, elementos naturales principales en su obra.

Posteriormente, desarrollaría su trabajo, interrelacionando elementos, combinando lo orgánico e inorgánico, provocando una lucha interna entre los diversos materiales empleados. Creando, como el propio artista ha indicado en un artículo para el Diario de León, una simbiosis entre las estructuras más o menos racionales con las formas orgánicas. Se trata de juntarlas para formar unas piezas que simbolicen un encuentro entre dos materiales. Todas tienen un diálogo entre los materiales y muestran el sentimiento del arrepentimiento de querer volver a unir algo que se ha roto previamente. 

Con ello hermana las formas naturales con frías estructuras metálicas, rompiendo de esta forma el equilibrio natural de los materiales para otorgarles una nueva vida. 

Sus obras son muestra de la geométrica y proporción, con carácter lineal abstracto y abierto, obteniendo formas limpias y puras, respetando la naturaleza, pero con una cierta tensión estructural. El tratamiento de los diferentes materiales y sus texturas dotan de gran expresividad a las obras. Una escultura basada en la relación entre las líneas verticales y horizontales que forman la pieza, tendente a la simplicidad y el orden.

INTERLUDIO I (Obra expuesta temporalmente en el Torreón de Pernía)

José Luis Casas, Interludio I, 2013

José Luis Casas, Interludio I, 2013

«Creo que soy escultor por casualidad. Por estar en un momento determinado en el lugar que va a marcarte para siempre. Es un instante mágico en el que decides que quieres trabajar con las ideas, con el espacio, con los recuerdos… que quieres convertirte en creador a través de las formas» José Luis Casas. 

José Luis Casas, Interludio I, 2013

José Luis Casas, Interludio I, 2013

José Luis Casas, Interludio I, 2013


En esta pieza podemos observar claramente, la interrelación de los elementos, tan presente en su obra, combinando lo orgánico e inorgánico, provocando una lucha interna entre los diversos materiales empleados, así encontramos la madera, el material orgánico, cambiante, que se degrada y por otro lado el metal, el material estático, inalterable. 

José Luis Casas está en el ámbito de la escultura que combina materiales diversos generando un dialogo de tensión o confrontación, pero al mismo tiempo de ruptura y unidad, aunque en este caso el material base y único es el natural, la madera; su obra nos introduce en la relectura de territorios vinculados al constructivo. (Palabras de Luis García, para la obra Interludio I en la exposición ‘Naturalezas’). 

MÁS OBRAS DEL ARTISTA

José Luis Casas, también ha realizado, entre toda su colección, obras públicas en León, aquí os dejemos dos ejemplos:

Desencuentro, 2005, Parque Escultórico Monte San Isidro, Sariegos, León
Fuente: esculturaurbana.com

Intramuros,2006, rotonda de las calles José Aguado y Ronda Sur, León
Fuente: esculturaurbana.com  


Enlaces de interés:

http://joseluiscasas.blogspot.com/ 

https://www.diariodeleon.es/articulo/cultura/escultor-casas-paramio-muestra-leon-curiosas-fracturas-liticas/20050804000000789720.html 

https://www.diariodeleon.es/articulo/filandon/jose-luis-casas-paramio-escultor-enamorado-naturaleza-geometria/201109180400011202500.amp.html 

http://www.esculturaurbana.com/paginas/casjl.htm